El mes de abril se caracterizó por precipitaciones regulares a buenas, que fueron en promedio 56 mm del área de influencia de la EEA INTA Balcarce, un 36% menores a los valores históricos de la región.
La mayoría de los cultivos de verano se encuentran en madurez fisiológica, siendo el avance de cosecha bajo, aproximadamente el 5%, para esta época del año en la región. El principal inconveniente ha sido días de lluvias recurrentes, sumado a la falta de piso en muchos lotes y caminos rurales que venían comprometidos desde las tormentas de marzo.
Los recursos forrajeros estuvieron en muchos ambientes afectados por anegamientos y también se reportaron retrasos en la siembra de verdeos de invierno y pasturas.